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Mirando desde la última bastión de la Cordillera de la Sal hacia el Llano de la Paciencia y la Cordillera de Domeyko al poniente.

Cien metros más abajo del punto en la foto de arriba, en el laberinto de las quebradas.

Por las gruesas capas de arcilla se extienden en todas direcciones innumerables vetas de yeso. Estas vetas tienen un espesor entre pocos milímetros y unos veinte centímetros. Cuando la arcilla todavía estaba mojada y empezó a secarse, las finas fisuras de desecación se llenaron con agua altamente saturada de yeso que poco a poco cristalizaba. Con aumentar el espacio de la fisura, los cristales de yeso crecieron igualmente.

Con la grieta en esta imagen (mide diez centímetros de espesor) no sólo hubo un movimiento lateral, sino también transversal, resultando así una cristalización en dirección oblicua, como bien es visible. En el medio de la veta podemos reparar en donde dio inicio la cristalización. Las vetas de yeso constituyen algo como un esqueleto que sostiene estos cerros de barro y arcilla con sus formas más que audaces.

Cristales puros de yeso.

En el fondo de las quebradas de arcilla siempre hay alguna sorpresa que le sonríe al visitante.

Las quebradas adelantan zigzagueando con innumerables meandros por los estratos sedimentarios verticales de los cerros. Para cubrir poca distancia hay que andar el décuplo. A veces, las quebradas perforan los obstáculos con túneles y hay que avanzar cuerpo a tierra, a veces topan con algua veta de cal, dando así lugar a una insuperable "catarata" que cae verticalmente por varios metros...

Una antigua mina de cobre en la Cordillera de la Sal

Hace dos mil años, en la cultura Mochica en Perú ya conocían el cobre y lo aleaban con el oro (la llamada tumbaga). Los objetos hechos en cobre los más viejos fueron encontrados en Anatolia (Turquía) y remontan a unos diez mil años antes del presente.

Actualmente, Chile con distancia es el más grande productor de cobre, su producción alcanza casi cinco veces aquella del segundo clasificado (Estados Unidos) y todos los grandes yacimientos chilenos se encuentran aquí en esta región.

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