CAPÍTULO PULACAYO - Destinos PÁGINA

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Leemos en "GEOGRAFÍA – ATLAS", editado en Barcelona, 1915
:

Bolivia, tal vez la más montañosa y elevada comarca de las dos Américas, ocupa la vasta meseta de su nombre y se interna al N. y E. en las cuencas del Amazonas y Paraguay. Su área es de 1'470'000 km² y su población de 2'300'000 habitantes.

Ciudades principales

Las ciudades de Bolivia, en su generalidad, son poco importantes. Cinco únicamente tienen más de 20'000 habitantes. La primera en influencia es Sucre la capital; la más poblada es La Paz; la más alta es Potosí; la de mayor actividad es Huanchaca. Todas están situadas en la meseta boliviana.

La Paz (100'000 hab.), rica en minas de oro y plata. Se eleva al O. del monte Illimani. La Paz está unida al lago de Titicaca por un ferrocarril (50 km). Fue asiento del Gobierno de 1857 a 1866.

Huanchaca, al SO. de Potosí, tiene las más ricas minas de plata de la América del Sur; aunque de fundación reciente, cuenta con más de 35'000 habitantes.

Potosí (30'000 hab.), a cerca de 4000 m de altitud, es la ciudad más elevada del globo. Evalúase en 9000 millones de pesetas el valor de la plata que sus minas han producido desde que fueron descubiertas.

Cochabamba (30'000 hab.), al centro de Bolivia, ocupa un valle fértil en trigo y hace gran comercio de granos.

Sucre o Chuquizaba (25'000 hab.), capital de la república, posee arzobispado, universidad, y es centro productor de telas y metales.

Es importante la exportación de minerales, pues, tan sólo de plata exporta por más de 23 millones de pesetas, 18 millones de estaño, 11 millones de caucho, etc. El comercio anual total es de 380 millones de pesetas.

(1 peseta en 1915 tuvo aproximadamente el valor equivalente a unos 10 Euros o 15 dólares en 2009)

Europa en este momento estaba hundiéndose en un abismo de sangre, en que dentro de los treinta años siguientes iba masacrar a más de sesenta millones de sus propios hijos. Sudamérica que milagrosamente salió ilesa de esta más grande catástrofe de la humanidad, por supuesto quedó en el foco de todos dispuestos a abandonar lo suyo y salir del Viejo Mundo en busca de nuevo porvenir más sereno. Así que por los años de su auge mayor a Pulacayo (Huanchaca) llegaban muchos Europeos, aparte de representantes del globo entero. Entonces, la Policía Minera de Pulacayo registraba todos los extranjeros que llegaban al centro minero. Lo que quedó de esos archivos, hoy da testimonio de este movimiento.

Ojalá lo siguiente consiga corregir la mala opinión nutrida en la página precedente "Historia Social" con vista a los forasteros en las minas, sugiriendo que todos eran "gringo-mulanes" o "gringo-brusmanes"


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Wolfgang Adam salvó su vida consiguiendo salir de Alemania en 1939, medio año antes de estallar la guerra. Estaba condenado a muerte dos veces – por tener fe judía y por vivir en Breslau, entonces todavía ciudad alemana.

Fue hacia el fin del 3° Reich cuando en invierno del '45 el Ejercito Rojo soviético avanzó hacia Breslau. Tres cuartos de los habitantes huyeron, muriendo a millares, congelados en el invierno silesiano. Por Pascua de Resurrección, pocos días antes del fin de guerra, encima de Breslau cayó una lluvia de bombas soviéticas. Veintidós mil de sus treinta mil edificios quedaron arrasados. En total, cientos y setenta mil personas civiles perdieron su vida en Breslau, además de seis mil soldados alemanes y siete mil soviéticos. Los vencedores trazaron nueva frontera, atribuyendo Breslau a Polonia que cambió su nombre para Wroclaw. Los tres ciento mil habitantes alemanes que habían vuelto fueron expropiados y expulsados.

Si Wolfgang Adam hubiese quedado, poco probable habría visto la caída de la ciudad pues en aquellos días los nacionalsocialistas alemanes acabaron por asesinar a entre cinco y seis millones de personas con fe judía, entre los cuales tres millones de polacos (además de otros tres millones polacos matados sin relacionarlos con la fe).

Así el joven Wolfgang a la edad de nueve años ingresa a Bolivia, probablemente junto con sus familiares y a los veintidós años de edad se inscribe con la Policía Minera de Pulacayo en el campamento minero el día 7 de marzo de 1952, justo en vísperas de una serie de levantamientos políticos en Bolivia, que dieron lugar a la Revolución Nacional, provocando en Pulacayo la nacionalización de la mina y el consecutivo paulatino descenso de la ciudad minera.

Más tarde volvemos a encontrar rasgos de Wolfgang Adam en varias ocasiones. Así en una emisión radiofónica de una estación alemana (SWR2, 17 de enero de 2002)*, en que otro alemán recordando su vida en Bolivia menciona:

"...Günther Friedheim (presidente de la Comunidad Judía en La Paz) me envía a su amigo Wolfgang Adam que igualmente se huyó a Bolivia en 1939 y que ahora tiene una tienda de joyas en La Paz..."

Además en una tesis presentada en la universidad FU Berlín en 1996, un estudiante se ocupó del tema "Vida judeoalemana en el exilio boliviano 1937-1945" y cita Wolfgang Adam repetidas veces: **

"...la mayoría que había entrado con visa para agricultura no se fue al campo, dado que nada estaba dispuesto u organizado de ninguna forma. Algunas de las familias bajaron a la selva del Chapare pero ya luego regresaron a la ciudad completamente empobrecidas..."

"...no se sabía si el dinero cobrado para la visa llegaba de veras al fisco o sólo hasta el bolsillo de los funcionarios, ni es que uno se importaba de eso, huyéndose de los nacionalsocialistas..."

"...los mayores problemas consistían en las nuevas condiciones de vida, en la situación higiénica y en nuestra pobreza, después de haberlo abandonado todo..."

"...particularmente los adolescentes teníamos bastante oportunidades de diversión. Estaban los Sionistas Unidos y el movimiento juvenil Maccabi Hatzair en que participé más tarde. Sin embargo primero entré a los boy-scout que se llamaban Scout El Cóndor. Allí pasé mi tiempo más feliz con viajes, excursiones, acampadas y con encuentros semanales con canto y juegos..."

Referencias:

* Claudia Heissenberg: Ein Indianer namens Hitler - Spuren deutscher Vergangenheit in Boliviens Urwald. Rundfunkmanuskript, Südwestrundfunk SWR2 17.01.2002

** Armin Lehmann, Deutschjüdisches Leben in der Emigration und im Exil in Bolivien 1937-1945, Magisterhausarbeit, Fachbereich Geschichtswissenschaften der Freien Universität Berlin, 12. 06.1996

Vea además:

Fluchtziel Bolivien 1933 – 1945, Julius H. Krizsan, 2009, ISBN: 978-3-640-35334-7

https://www.grin.com/e-book/129862/fluchtziel-bolivien-1933-1945

o en →Google books



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Aquí tenemos a Hans Hartmann Schick, connacional y coetáneo con el susodicho Wolfgang Adam. Nació en Eppstein, una aldea con un grande viejo castillo en la cercanía de Francfort, que en la posguerra quedó en la zona del "mundo libre".

Al parecer, Hans pasó la guerra en Alemania (70% de Francfort fue destruida por los Aliados) y llegó a Pulacayo en agosto del '50 a la edad de 21 años con función de técnico mecánico, habiendo ingresado a Bolivia sólo tres días antes de presentarse en la mina.

Por cuanto se pueda reconstruir, la vida de este joven de gesto resoluto probablemente tuvo un fin trágico – su huella se pierde en una vieja y larga lista de personas desaparecidas en Brasil...



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Paciencia Maravilla Fagan – Paciencia Maravilla – hay que repetir este nombre tan lindo que suena como una sinfonía. Esta ficha está para conmemorar a todas las mujeres que abandonaron sus tierras lejanas para acompañar a sus maridos a esta serranía tan hostil.

Paciencia nació en Saravia (hoy Enrique B. Magalona), un pueblo en la isla Negros en las Filipinas, ubicado en medio de plantaciones de arroz a orillas del mar tropical. Más tarde la encontramos de mujer casada en California en EE.UU. junto con su marido, el ingeniero de minas estadounidense Thomas James Fagan. Thomas Fagan llegó a Pulacayo en octubre del '46, ocho meses antes de su esposa, ocupando el cargo de jefe seccional con un salario mensual de 325 dólares, equivalente a 3260 dólares en 2010 – nada mal. Leemos en la Página precedente "Mito y Historia" que cuatro años más tarde en 1950 el 37% de los obreros percibía salarios mensuales de unos 3000 bolivianos (30 dólares en 2010). De más, se informó que existían salarios mensuales hasta de 600 bolivianos...






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última actualización 2022-05-20